Austin, Texas — En una victoria emblemática bipartidista en pos de la justicia en materia tributaria y el control de las entidades locales, el gobernador Greg Abbott promulgó HB 1, escrito por el representante Gary Gates (republicano, de Rosenberg) y patrocinado en el Senado por el senador Paul Bettencourt (republicano, de Houston). Con efecto inmediato, la nueva ley cierra una laguna legal de 5 mil millones de dólares que permitía a desarrolladores inmobiliarios externos a la jurisdicción aprovechar exenciones de impuestos, maniobra que les quitaba ingresos a las comunidades locales sin hacer más asequibles las viviendas. A través de HB 21, se repara un mercado de 16 mil millones de dólares, ya que se reestablece se vuelve a exigir que los gobiernos locales aprueben las exenciones impositivas, lo cual garantiza el cumplimiento de la reducción de los alquileres y la restauración de la justicia en materia tributaria.

“Lo que se mide se puede arreglar y este proyecto de ley arregla un problema de 5 mil millones de dólares”, dijo Bettencourt. “Con HB 21, protegemos nuestros impuestos y exigimos viviendas realmente asequibles a cambio de exenciones públicas de impuestos, no de tramoyas de asociaciones fantasmas. Las exenciones, se las tienen que ganar, y los negocios inmobiliarios tienen que ayudar a las personas a las que dicen atender, en lugar de mandarles la factura a los contribuyentes locales”, agregó.

Durante años, con arreglo a la ley vigente, los desarrolladores se han aprovechado de las sociedades de financiación de viviendas formadas por ciudades y condados, cuyo propósito es apoyar la construcción de viviendas para familias de bajos ingresos. Los desarrolladores se asocian con sociedades de financiación "itinerantes", fuera de la jurisdicción, para acceder a la exención plena de los impuestos a la propiedad para viviendas plurifamiliares, sin reducir los alquileres, ni haber conseguido el aval del gobierno local ni brindarle beneficio alguno a la comunidad.

Los desarrolladores promocionaban a viva voz estos “acuerdos perfectamente equilibrados con empresas de financiación” en el sector financiero, prometiendo exenciones fiscales por 99 años sin reducir los alquileres y, en algunos casos, incluso aumentándolos. El condado de Cameron, el condado de Maverick, la Ciudad de Pecos y Pleasanton crearon sociedades fantasma que adquirieron propiedades en todo Texas sin aprobación de las unidades fiscales locales y con exenciones de hasta 99 años.

En HB 21, se hacen reformas al Capítulo 394 del Código de Gobierno Local para frenar esos abusos, en particular se establece lo siguiente:

• Las ciudades o los condados deben aprobar cada acuerdo o proyecto con las sociedades de financiación de viviendas
• Deben apartarse por lo menos 50% de las unidades funcionales para alquileres asequibles a familias de ingresos bajos
• Deben reducirse los alquileres de tal manera que equivalgan al 50% de los ahorros en impuestos
• Deben remitirse auditorías anuales independientes a la agencia de vivienda del estado.
• Las propiedades existentes deben cumplir con las siguientes fechas límite: auditorías, 2027, y asequibilidad, 2035.

Estas normas se aplican a los acuerdos actuales y nuevos, para garantizar que las exenciones impositivas cumplan el requisito legal histórico de favorecer el bien público.

“Con HB 21, las sociedades de financiación de viviendas que beneficien a la comunidad de manera medible y verificada a través de viviendas realmente asequibles podrán acceder a las exenciones impositivas. La aprobación de este proyecto de ley es una importante victoria para los contribuyentes de Texas y para que las viviendas del estado sean más asequibles de verdad. Quiero agradecerles a los innumerables texanos que abogaron por este proyecto de ley, al presidente de la Cámara de Representantes Burrows y el vicegobernador Patrick por hacer de este proyecto una prioridad, al senador Bettencourt por patrocinarlo en el Senado y al gobernador Abbott por promulgarlo”, dijo el representante Gary Gates tras la aprobación de la medida.

El senador Bettencourt concluyó con un agradecimiento especial al Comité Senatorial de Gobierno Local, el Senado de Texas y las entidades homólogas en la Cámara de Representantes que ayudaron a convertir en ley a HB 21.

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