Comité de Educación considera proyecto principal de financiación de la sesión
(AUSTIN) — El estado está a punto de invertir más dinero que nunca en educación pública en esta sesión legislativa, según el presidente del Comité Senatorial de Educación Inicial, Media y Superior. El jueves, el comité celebró una audiencia sobre el Proyecto de Representantes 2 (HB 2), la versión del Senado de un plan para aumentar 8 mil millones de dólares la financiación destinada a educación pública. Más de la mitad de ese dinero se usará en aumentar la remuneración de los maestros. El senador Brandon Creighton, de Conroe, patrocinador de la medida, les dijo a los miembros del comité que la medida más que cuadruplica el aumento promedio que se hace en una sesión legislativa. “Son fondos históricos y emocionantes para nuestras escuelas públicas”, dijo. “Más fondos que ningún paquete de educación pública que hayamos aprobado: cada distrito se beneficia, desde Beaumont hasta El Paso, desde Wichita Falls hasta McAllen”.
Quizá la diferencia más grande entre el plan de la Cámara de Representantes y la de Senadores se reduzca a la manera en que se inyectan los fondos nuevos a la educación pública. Ambas cámaras consignan los mismos fondos generales a educación pública, pero Representantes aumenta 400 dólares la asignación básica, la variable central que define cuánto dinero recibe un distro por alumno. La propuesta del Senado dispone un aumento más modesto, 55 dólares, pero crea la asignación salarial para maestros, la cual, según Creighton, liberará recursos de la asignación básica que los distritos podrían usar para otros propósitos. “Como estamos moviendo miles de millones de dólares de la asignación básica y estamos creando una nueva asignación permanente para los maestros, se liberan fondos de la asignación básica”, dijo. El senador afirmó que esto les permitiría a las escuelas pagarle más a su personal no docente. La medida garantiza aumentos salariales para los maestros cuando alcancen su tercer y quinto año de ejercicio de la profesión, garantía que hace permanente la nueva asignación, dijo Creighton. De los fondos nuevos de 4.2 mil millones de dólares que se invertirán en compensación para maestros, Creighton dijo que el 80% fluirá a través de la asignación para maestros y 20% se usará en aumentar el programa de bonos por mérito para los maestros, la asignación para el incentivo docente. La medida aumenta las bonificaciones para los maestros y establece que hasta la mitad de los educadores de un distrito podría calificar para el programa de incentivo.
El cronograma propuesto de aumentos es el mismo que el de la versión que aprobó el Senado en marzo, mediante el Proyecto del Senado 26. La propuesta distingue entre distritos grandes y pequeños para fomentar que los salarios de los maestros rurales se pongan al día con los de los maestros urbanos. Al alcanzar el tercer año en la profesión, los educadores reciben un aumento: 2,500 dólares si enseñan en un distrito urbano y 5,000 dólares en uno rural. En su quinto año, reciben un segundo aumento: 3,000 dólares en un distrito rural y 5,000 dólares en uno rural. Los maestros en ejercicio hoy que tengan cinco o más años de experiencia recibirán los dos aumentos combinados, mientras que aquellos con tres o cuatro años de experiencia recibirán el primer aumento y tendrán que esperar al quinto año para el segundo. “En cuanto al salario inicial de los maestros, el estado está décimo cuarto en el país, pero estamos más atrás en materia de remuneración de maestros experimentados”, dijo Creighton. “Y los estamos perdiendo”.
HB 2 también contiene el texto de varias medidas aprobadas en el Senado por amplia mayoría. Algunas de estas iniciativas mejoran las condiciones laborales de los maestros, brindan capacitación profesional y en tecnología, destinan 1.3 mil millones de dólares nuevos a educación especial y 500 millones a seguridad escolar. También financian la creación de programas de mentorías, capacitaciones y el acceso a certificaciones para aquellos maestros que no estén certificados. Creighton dijo que esta era la situación de 56% de los maestros nuevos que ingresaron en las aulas en 2024. La medida exige que todos los maestros de escuela pública estén certificados en 2030.
Dadas las diferencias entre las dos cámaras es probable que establezcan un comité conciliador para llegar a un acuerdo y unificar las dos propuestas. Tendrán tiempo hasta que termine la sesión, el 2 de junio, para cumplir la promesa de aumentar más que nunca la financiación escolar y el salario de los maestros. Los fondos para este propósito ya están detallados en las versiones del presupuesto de cada cámara, ahora solo queda definir la mejor manera de que lleguen a las escuelas.
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