Proyecto de ley restauraría las citaciones por infracciones escolares

(AUSTIN) — Los estudiantes que agredan a un maestro o amenacen con ello podrían enfrentar consecuencias legales, conforme a un proyecto que se aprobó en el Senado, el lunes. En 2013, la legislatura quitó a los policías de las escuelas la autoridad de producir citaciones legales a los estudiantes que infringieran normas escolares, a raíz de inquietudes en torno al abuso de esta práctica y castigos injustos o draconianos. Sin embargo, según el senador Brandon Creighton, de Conroe, desde entonces ha habido un aumento de incidentes violentos que preocupan a maestros, administradores y policías, y que quizás alejan a los educadores de la profesión, temerosos por su seguridad. “Las herramientas disciplinarias no alcanzan”, dijo Creighton. “Algunos dijeron que pasamos de una tolerancia cero a consecuencias cero en las aulas”. Su Proyecto del Senado 1924 permitiría que los policías de las escuelas realicen citaciones por delitos menores clase C ante violaciones graves a las normas escolares. “Se busca frenar comportamientos peligrosos o que pueden escalar antes de que sea peor”, dijo. “El objetivo es prevenir problemas, no castigar con dureza. Queremos que los estudiantes y las familias entiendan que la mala conducta grave tiene consecuencias”.

Creighton explicó que, si bien la intención hace doce años era buena, fue demasiado lejos. Su iniciativa busca encontrar un equilibrio entre los dos extremos. Eso no quiere decir que haya ambigüedades cuando se amenaza con agredir maestros: esas trasgresiones deben notificarse a la policía. “Los maestros merecen sentirse seguros en el aula y los estudiantes no pueden aprender si los maestros no se sienten seguros”, dijo el senador.

El senador Royce West, de Dallas, añadió enmiendas para garantizar que las medidas disciplinarias que se apliquen conforme al proyecto sean justas y respeten el debido proceso de la ley.

Creighton aceptó tres enmiendas del senador Royce West, de Dallas, que apuntan a garantizar que los estudiantes gocen del debido proceso legal y que se eviten las malas prácticas que conllevaron a eliminar las citaciones en 2013; malas prácticas que, según dijo, afectaban de manera desproporcionada a los estudiantes de grupos minoritarios. “Lo que no quiero que ver es otra situación como la de antes de 2013, en la que jovencitos afroestadounidenses e hispanos recibían los castigos más duros por cosas que no tenían sentido, como masticar chicle o cosas así”, dijo. En lugar de eso, las escuelas deberían usar un sistema de sanciones escalonadas, que involucren a la policía como último recurso, excepto cuando los estudiantes amenacen con agredir. “Tenemos que asegurarnos de que haya una tolerancia cero a ese tipo de comportamientos”, dijo West. “Pero también tenemos que asegurarnos de que haya sentido común en lo que respecta a algunos de los castigos que se van a impartir”. Sus enmiendas disponen que se usen castigos de distinta jerarquía, que los antecedentes relativo a delitos perpetrados por menores bajo este proyecto se borren al alcanzar la mayoría de edad y que, si hace falta arrestar a un estudiante, se haga fuera de la vista de los compañeros, a menos que exista una amenaza inmediata a la seguridad.

También el lunes, el Senado aprobó un proyecto que sanciona más duramente los incidentes vinculados a la furia al volante, ya que los incluye en la definición de “agresión agravada”. En los últimos diez años, Texas tuvo más incidentes de furia al volante con armas de fuego que ningún otro estado, y la senadora Joan Huffman, de Houston, dijo que estas situaciones son muy peligrosas tanto para la víctima como transeúntes inocentes. “En estas situaciones, las víctimas suelen sentirse atrapadas y temen por su vida, con opciones de escape limitadas”, dijo. “Los intentos de evitar el peligro pueden escalar el encuentro y aumentar el riesgo de heridas graves o de muerte de otras personas en la carretera”. Su medida, el Proyecto del Senado 3031, aumenta la pena, de delito mayor de segundo grado a primer grado, por agresiones que involucren un arma de fuego, si la persona está dentro de un vehículo o acercándose o alejándose de uno. Para pedir esta sentencia, los fiscales deben demostrar que una persona disparo de forma intencional a una vivienda o un vehículo sin importarle si había alguien adentro.

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