El Senado aprueba programa mejorado de incentivos al cine
(AUSTIN) — El miércoles, el Senado aprobó un plan que inyectaría 2,500 millones de dólares estatales en un plazo de diez años a un fondo para que se filmen más películas y programas televisivos a Texas. El Programa de Incentivos para la Industria de la Imagen en Movimiento de Texas se creó en 2007 con el objetivo de atraer producciones al estado de la Estrella Solitaria. A través del programa, se reembolsan gastos por la contratación de mano de obra texana y la compra de productos texanos. Sin embargo, la financiación no ha sido constante. Si bien en la última sesión se invirtió en el programa más que nunca —una partida presupuestaria de 200 millones de dólares por bienio—, el Proyecto del Senado 22, de la senadora Joan Huffman, de Houston, presidenta del Comité de Finanzas, más que duplicaría ese monto, a la vez que haría el programa más estable y predecible. Hoy, dijo la senadora, Texas pierde contra otros estados con programas de incentivos al cine más sólidos. Fortalecer el sistema actual del estado y crear una fuente de ingresos confiable cambiará eso. “Le da certezas a la industria y los inversores que quieren traer estos magníficos puestos de trabajo a Texas”, dijo Huffman.
La senadora Joan Huffman, de Houston, dice que su medida, el Proyecto del Senado 22, que amplía el programa estatal de incentivos al cine, traerá más dinero y puestos de trabajo al estado de Texas.
Huffman afirmó al pleno que el programa ha sido un éxito en sus casi 20 años de historia: se crearon 189,000 puestos de trabajo y se generó un beneficio económico de 2,500 millones de dólares. Por cada dolar que se invirtió en el programa, el estado ganó cinco veces más en actividad económica. La medida de la senadora no modifica el marco de trabajo que fija las reglas y los estándares que rigen los incentivos. La Oficina del Gobernador, que administra el programa, podrá rechazar las solicitudes de subvención por cualquier motivo, por ejemplo, contenidos objetables o una representación negativa de Texas o sus habitantes. Los recibos se revisarán de manera meticulosa y solo se entregarán subvenciones una vez que el proyecto esté terminado y solo si cumple todos los estándares que establece el programa. Los reembolsos se limitan al dinero invertido en Texas —hasta 25% del gasto— y solo a proyectos que filmen al menos 60% de la producción en el estado. Los gastos reembolsables incluyen salarios pagados a residentes de Texas, dinero pagado a empresas ubicadas en Texas e incluso pasajes de avión de ida y vuelta a Texas a aerolíneas ubicadas en el estado. “Todo tiene que ser de Texas y estar vinculado a un efecto positivo al estado de Texas”, dijo Huffman.
El programa también incluye una serie de incentivos adicionales que pueden aumentar el límite de los reembolsos hasta un 31% si la producción cumple con ciertas condiciones. Cada una de las siguientes decisiones implica un reembolso de 2.5% adicional: filmar en Texas rural, contratar a veteranos militares de Texas y obtener la calificación "Patrimonio de Texas", cuando el producto filmográfico promueve los valores texanos y de familia. Un enmienda al proyecto daría este porcentaje adicional a los proyectos basados en la familia y la fe, una prioridad del vicegobernador Dan Patrick. “Todos los cineastas de la categoría familia y fe dicen que seremos líderes en el mundo de las películas basadas en la fe y la familia, en todos los credos y familias, y eso siempre es algo bueno, vender al mundo nuestros valores texanos, valores de fe y de familia”, dijo. Las producciones de cine y televisión pueden conseguir un reembolso adicional de 1% si completan la posproducción, por ejemplo, la edición, la edición de sonido y los efectos visuales aquí, en Texas.
Una grupo de legisladores pidió la palabra para apoyar la medida. El senador Phil King, de Weatherford, dijo que las producciones en su distrito representan un impulso económico para esas comunidades y traen beneficios que van más allá de la ganancia programada. “Los pequeños empleos, las oportunidades, los restaurantes llenos, los alquileres de equipamiento... puedo decirles que lo veo en Weatherford, y Weatherford nunca tuvo nada que ver con la industria cinematográfica hasta los últimos años”. Para la senadora Carol Alvarado, hacer películas va más allá de una cuestión económica, se trata de contar nuestras propias historias desde aquí mismo. Se trata del orgullo del estado. “Esta medida moderniza y fortalece nuestro programa de incentivos para la industria de la imagen en movimiento, para garantizar que cuando una producción busque cielos abiertos, bullicio urbano o coraje texano, no tenga que salir a buscarlo en Nuevo México, Georgia o California, sino que se quede aquí”, dijo. “Asegurémonos de que cuando Texas esté en el guion, también esté en la pantalla”.
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